El acompañamiento de los chicos en actividades en casa es esencial para fortalecer la seguridad, cariño, comunicación, unión familiar y simplemente para que los niños sientan la parte tan importante que son en la familia. Estas son algunas de las características positivas que he llegado ha notar en mi experiencia de maestra y mamá y lo mejor de todo es que le voy encontrando cada vez más beneficios para ellos (alumnos/hijos) y para mi.
Para la sección de «Lunes de actividad» he hecho una clasificación de acompañamiento que me pareció apropiada para aplicar con los chicos en cualquier actividad en la que estemos presentes como padres. No siempre se requiere que los papás participen activamente, hay ocasiones en las que el solo hecho de estar a su lado viéndolos es más que suficiente.
Los padres y adultos en general solemos cortar posibilidades del juego o actividad debido a la experiencia que ya tenemos, y participamos con buena intención, pero podemos llegar a truncar la gran posibilidad de caminos y maneras de hacer las cosas de los niños, podemos quitar la posibilidad de equivocarse y que ellos mismos corrijan, logrando tener un aprendizaje más significativo debido al esfuerzo y trabajo puesto en dicha actividad.
Podemos hacer consciente que no se trata de decirles exactamente lo que van a hacer, sino de dar ideas, acercar materiales, proporcionarles espacios apropiados y tiempos de creación espontáneos o planeados, cuestionarlos, modificar en la medida de lo posible lo que ya hay, para obtener un resultado satisfactorio para el que lo hace (los niños), no necesariamente para el que acompaña (los padres).
Recomiendo que todas las actividades sean en compañía de los padres o un adulto, esto pensando en la seguridad física y emocional de los niños. En seguida hago una clasificación de acompañamiento que iremos recomendando para mayor disfrute de los niños en cada una de las actividades que se publiquen en los Lunes de actividad.
Acompañante presencial. Se sugiere que los papás estén en el momento de juego solamente por el placer de observar a los niños jugar y el placer de los niños de tenerlos cerca en ese momento. Este acompañamiento puede ir perfecto en juegos libres, de expresión artística y exploración de materiales, entre otros.
Acompañante guía. Este acompañamiento puede funcionar en actividades o juegos que tengan un grado de dificultad mayor, aquellos en los que se pueda requerir apoyo para lograr un objetivo. Podemos acompañar a los chicos haciendo preguntas para que lleguen a su propia reflexión a manera de guía: ¿Cómo lo hiciste? ¿Qué material crees que funcione mejor? ¿Por qué se cae? ¿Por qué no pega? ¿Qué otra opción hay? ¿Por qué no funcionó? etc.
Acompañante activo Se sugiere en actividades que involucren algún riesgo o esfuerzo que deba ser hecho por un adulto y/o con su supervisión permanente, por ejemplo al clavar, excavar, cortar, unir, etc.
Estaremos usando estas clasificaciones en las actividades que se publiquen, si te sirven, úsalas; si tienes dudas, pregunta y si ya tienes tus estrategias, compártelas con la comunidad Lunario para incrementar nuestras herramientas como padres.
Nos leemos pronto
